Era 31 de octubre del 2003, yo (Mike) y mis amigos Frank y Lester, nos dirigíamos hacia el bosque Burkittsville en Estados Unidos, estábamos aburridos de las típicas noches de brujas donde salías a aburridas fiestas o simplemente a pedir dulces casa por casa por lo que queríamos hacer algo diferente esta vez,  según las leyendas que habíamos escuchado del bosque decían que estaba encantado, que algunas personas habían logrado divisar a lo lejos un hombre parado observándolos, lo que alcanzaron a reconocer del misterioso hombre fue que llevaba una máscara blanca con manchas rojas que muy probablemente era sangre y que llevaba en la mano derecha  un machete en iguales condiciones. Queríamos comprobar si este hombre existía, como tanto se rumoreaba en el pequeño pueblo que estaba cerca a este bosque, o si simplemente era otra leyenda como la de bigfoot, una casi inexistente.

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A las 2 de la tarde habíamos acomodado nuestras pertenecías en una cabaña, solo llevamos lo esencial a la expedición, empezamos a ingresar al bosque, tenía un ambiente extraño, solo podíamos escuchar un silencio ensordecedor, no lo tomamos muy en cuenta pensando que sería por la hora del día, caminamos sin rumbo buscando algo que nos diera pistas de la ubicación del extraño hombre, hasta que dimos con la primera de nuestras desdichas, una casa abandonada, que parecía tener algunas marcas de sangre en su exterior, nuestro miedo empezó a subir pero nuestra curiosidad aún más.., entramos en la casa, estaba claro que estuvo abandonado por años, pero parecía que alguien recientemente  había estado viviendo en el lugar, empezamos a escuchar lamentos, gritos y susurros en algunas habitaciones, ya nos estábamos empezando asustar de verdad, pero lo pero estaba a punto de venir, la casa tenía un sótano que tenía una puerta metálica oxidada, sellado por varias cadenas y maderos, los retiramos con complicación, frente a esa puerta estábamos buscando algo que supusimos que no era verdad, grave error, al abrir la puerta, nos encontramos con una montaña de cadáveres que debían tener ya meses porque desprendían un fétido olor, empezamos a escuchar pasos por lugar, por lo que salimos lo mas rápido posible de ahí, al salir de la  casa nos dimos cuenta que ya estaba empezando a oscurecer, nos sería más complicado regresar a la cabaña, nos apresuramos pero la  noche igual nos alcanzó, empezamos a perder el rumbo, no sabíamos que hacer, el mapa no lo podíamos utilizar sin una linterna, avanzamos despacio tratando de recordar los lugares por los que habíamos pasado sin éxito, escuchamos pasos que no eran nuestros detrás de nosotros volteamos hacia donde provenían los pasos, lo que alcanzamos a ver fue lo que no me hace tener que corroborar leyendas nunca más, era una figura humanoide, de 2 metros de altura, tenía una túnica, una máscara como tanto describían pero esta vez estaba completamente ensangrentada al igual que su machete, puedo asegurar que hasta goteaba sangre pero no me iba a quedar a averiguarlo, lo primero que hice fue salir corriendo al igual que Frank y Lester, sin rumbo, no importaba, lo único esencial en ese momento era que no nos atrapara, corrimos por unos 10 minutos hasta que no escuchamos nada detrás de nosotros, pero al momento de descansar Frank decidió adelantarse para poder ver una salida de este bosque maldito, pero no lo logro, empezó a gritar con un dolor terrible, fuimos en su ayuda para enterarnos que pasaba, había sido atrapado por un trampa para osos, que lo dejo inmovilizado, su pierna.. estaba completamente destruida si lo liberábamos no lograría dar ningún paso, lo peor fue que volvimos a escuchar los pasos cerca de nosotros, no quedaba otra opción, lo dejamos, atrapado en esa trampa completamente aterrado, cuando miramos atrás por última vez, vimos como lo decapitaba con ese machete, todo rastro de vida en su semblante desapareció, mientras su cabeza caía al suelo.

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Corrimos escapando por nuestras vidas, torturándonos por la muerte de Frank, pero no era momento de lamentos, debíamos de salir del bosque con vida, para nuestra buena suerte encontramos una cabaña, no muy espaciosa pero útil, al tener un mapa que señalaba nuestra ubicación, y una linterna que todavía tenía pilas, leímos rápidamente el mapa y ubicamos nuestra cabaña, estaba a 600 metros, para llegar más rápido, debíamos pasar un puente, era la mejor opción.., no encontramos nada en el camino, parecía que ese monstruo había dejado de seguirnos, más relajados llegamos al puente, no era un puente común, este era colgante, un poco viejo pero resistente, empezamos a cruzarlo sin problemas, Lester quizás se relajó demasiado, empezó a vociferar nuestra momentánea victoria contra ese monstruo, no presto atención a su camino y su voz no me dejo escuchar los pasos de ese despreciable ser, escondido detrás de un árbol frondoso que se encontraba delante de nosotros apareció, detuvo Lester de un golpe seco en la cara, no fue con un machete, esta vez fue un mazo.., con la cara desfigurada, caía al suelo sin vida, yo.. yo… no pude..hacer….n…a…d….a, de nuevo, solo escape, que podía hacer, no puedo revivir a un muerto y menos pelear con un asesino, con ese maldito pisándome los talones, llegue a la cabaña tome las llaves del coche, lo encendí y completamente aterrado pise el acelerador para nunca más volver a ese lugar.

Meses después y aun no encuentran sus cuerpos solo el de un hombre que llevaba una máscara ensangrentada y un machete con el que se presume se suicidó, ..esta..vez sí logre…hacer algo..bien…..¿no es cierto amigos?”.